Elaboración artesanal de alimentos
Durante el segundo cuatrimestre de 2016, en el marco de la asignatura Microbiología Industrial, un grupo de docentes y alumnos realizaron uno de los trabajos prácticos en el emprendimiento de elaboración artesanal de alimentos “Asociación Civil Peldaños”, que sin fines de lucro, trabaja para la integración y superación de personas con capacidades diferentes.
Debido a que la asignatura incluye temas de fuerte aplicación en la industria, desde hace tiempo ha surgido en la cátedra la iniciativa de adaptar uno de los trabajos prácticos (TP) para poder realizarlo en un entorno laboral real. “Fue así que nos conectamos con Peldaños y con ellos pudimos concretar nuestro proyecto de llevar el TP: Calidad Higiénico Sanitarias en la producción de alimentos a un ámbito real. En este TP los alumnos tienen que diseñar un programa de control de calidad higiénico sanitario y resultaría ideal trabajar en la fábrica, con las complejidades propias del lugar, la producción, los equipos, los operarios, etc”, explica la Lic. Sandra Mugliaroli, docente de la carrera de Ing. de Alimentos de la FIUBA, quien junto a sus colegas Dra. Laura Schelegueda, Ing. Gabriel Finten y los alumnos Tomás Díaz, Andrés Gauthier y Pablo Pérez, formaron parte de esta experiencia.
“Los alumnos nos hicieron una muy buena devolución de la experiencia. Por una parte, valoraron la oportunidad de ver una fábrica, aplicar lo teórico, realizar un programa de control de calidad, diagramar un plan de acción, opinar y sugerir sobre situaciones reales. Los movilizó fuertemente el hecho de haber trabajado en un emprendimiento de trabajadores con distintas capacidades y comprobar el potencial de esas personas. Por otro lado, los miembros de la asociación se mostraron agradecidos con nuestra participación y consideraron valiosos los aportes de los alumnos respecto de sugerencias y observaciones que derivaron de la elaboración de su trabajo práctico”, afirma Mugliaroli, quien impulsó este acercamiento entre la FIUBA y la Asociación “Peldaños”.
“La experiencia en su conjunto ha sido muy satisfactoria, se pudieron reunir objetivos de aprendizaje muy valiosos como el desarrollo de desempeños profesionales y la integración social, resultando así una actividad educativa y social integral”, sintetiza Mugliaroli, detallando su agradecimiento al Departamento de Ingeniería Química, a la Dirección de la Carrera de Ingeniería de Alimentos y a la Secretaría de Extensión y Bienestar Estudiantil de la FIUBA por el apoyo brindado a la hora de implementar esta iniciativa.